/Llanos Esmeralda García/Fotos: María Guerrero/Video: Jennifer Comuñas/
La DGT ha puesto en marcha durante este fin de semana una campaña especial sobre control de alcohol y drogas, con la colaboración de la Asociación ASPAYM de enfermos medulares. Bajo el slogan ‘No corras. No bebas. No cambies de ruedas’ se pretende concienciar a los conductores del peligro de determinadas acciones para la seguridad y salud. Según el Observatorio de Seguridad Vial de la UE en el 25% de los accidentes de tráfico están implicados vehículos en los que los conductores llevan tasas de alcoholemia positiva.
La campaña ha sido presentada en Albacete por el subdelegado del Gobierno en Albacete, Aquilino Iniesta, que ha estado acompañado del presidente de la Asociación ASPAYM, José Antonio Córdoba, y del Capitán del Subsector de Tráfico de Albacete, Félix Plaza.
El objetivo es que cada miligramo de alcohol no llegue a suponer un peligro en la carretera no solo para el conductor sino para el resto de usuarios de la vía, así ha detallado Iniesta que se han realizado entre 2014-2015 en el país 5,7 millones de controles de alcoholemia de los cuales 4,9 eran preventivos, “el objetivo es bajar en un 1% las tasas de positivos” así insiste en que “hemos bajado en el último decenio de 5,1 la tasa de positivos a 1,6”, pero muestra que todavía “hay que seguir incidiendo en ello, no solo en el consumo de alcohol al volante sino también de drogas”.
Y es que el consumo de alcohol y drogas está contraindicado con la conducción, en el caso del alcohol las sanciones administrativas con 0,25 gramos de aire espirado y 0,50 en sangre se sancionan con 500 euros y la retirada de 4 puntos; entre los 0,5 o superior con una multa de 1.000 euros y 6 puntos, y la reincidencia es la misma sanción económica pero se retira entre 4 o 6 puntos dependiendo del grado de alcoholemia.
Cuando se sobrepasa el límite por consumo de alcohol se convierte en delito por lo que si la tasa es superior a 0,6 mg/l de aire espirado o de 1,2 gr/l en sangre la sanción son de 3 a 6 meses de prisión o multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad, y retirada del carné de 1 hasta 4 años. Y conducir bajo los efectos de las drogas la infracción penal oscila en una pena de tres a seis meses de prisión, multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad y privación del derecho a conducir de 1 hasta 4 años. En el caso de negarse a someterse a las pruebas se considerará delito, con una pena de prisión de seis a un año y privación del derecho de conducir de 1 a 4 años.
Así, asegura Iniesta que se está multiplicando también la detección de sustancias estupefacientes, “hemos pasado de realizar 29.000 controles en 2014 a más de 76.000 en 2015”, lo que conlleva una sanción de 1.000 euros y la retirada del carné. Una campaña que se enmarca dentro del Plan Estratégico de Seguridad Vial 2011-2020 en el cual la DGT amplía el número de controles a realizar a lo largo del año a fin de erradicar las circunstancias del alcohol al volante ha dicho Plaza “controles que se realizan a lo largo de todas las horas del día, en este caso diurno”.
Aspaym lleva realizando esta campaña junto a la DGT desde hace 10 años, así su presidente detalla que “nos hemos dado cuenta que con estas campañas llegamos a la gente y que son efectivas”. Relata Córdoba que “siempre se dice el número de muertos, pero no que hay unas lesiones muy graves, traumatismos cráneo encefálicos y lesiones medulares que son irreversibles que afectan al sistema nervioso central, en este caso la médula espinal. Por lo tanto con esta campaña se pretende no cambiar las ruedas de un coche o de una moto por las de una silla de ruedas, ya que son para toda la vida”.
Ángel Viso, voluntario y miembro de Aspaym, ha estado presente esta mañana en el control preventivo de alcoholemia realizado en la A-31, trasladándole a los conductores con su presencia, las consecuencias y secuelas irreversibles de los actos imprudentes a manos del volante con el convencimiento de que el impacto del testimonio personal es muy eficaz. “Hace 27 años, un lunes, y simplemente por no haber dormido suficiente, me salí de la carretera a 100 kilómetros de casa”, explica que según el informe de la Guardia Civil “me quedé dormido y me salí por un barranco” reivindica que “las lesiones medulares no son reversibles”.
Así, en el control preventivo de alcoholemia aseguraban los conductores que este tipo de campañas son eficaces para concienciar a la población, además se les ha hecho entrega de un folleto que recoge consideraciones y recomendaciones para evitar los accidentes de tráfico y sus consecuencias.
