/Sandra Manzanares/
Castilla-La Mancha continúa inmersa en su lucha por demostrar que las desaladoras son una “alternativa viable” para solucionar los problemas del agua. En este sentido, el portavoz del Ejecutivo Regional, Nacho Hernando, se ha referido a la autorización que concedía este jueves el Ministerio de Agricultura para que se realizase el trasvase desde una desaladora de Torrevieja, un paso “importantísimo” en un diálogo donde se ha demostrado que “hay alternativas distintas al trasvase”.
De hecho, en el momento en el que “hay menos agua en los embalses de cabecera”, tanto el Gobierno de España como el Levante se han dado cuenta de que el Gobierno de Castilla-La Mancha “tenía razón y que hay que dejar de mirar hacia el Tajo y al Atlántico”, pues la solución, incidía Hernando está en mirar hacia el este, “al Mediterráneo y a las desaladoras, que son una opción alternativa viable”. Y es que, para Hernando, “la única razón por la que quieren el trasvase es porque es mucho más barato y no porque sea más viable técnicamente”.
Así, el portavoz socialista ha mostrado su satisfacción pues “esto es un paso más después de haber conseguido la importante visita de los europarlamentarios al río Tajo, que vinieron a decir lo que decíamos todos”, y no es otra cosa más que “no es permisible que el agua del trasvase y el caudal ecológico del río Tajo en realidad sean las aguas fecales de Madrid, por lo que hay que buscar alternativas”.
De esta manera, Hernando ha recordado las expectativas de futuro que hay en cuanto al agua, y es que a este ritmo, “antes de 2.019 no quedaría ni una sola gota de agua” en los embalses de cabecera, por lo que “la solución tiene que ser conjunta” para Castilla-La Manca y Levante, y “la han demostrado el propio Levante y el Gobierno de España, que todavía a día de hoy se niega a iniciar un diálogo como se habían comprometido en la reunión de presidentes autonómicos, y darse cuenta de que hay otras soluciones alternativas”, declaraba Hernando.
