/Llanos Esmeralda García/
Los dos menores que continuaban ingresados en el Hospital General de Albacete después de que Sanidad confirmara un brote de una contagiosa bacteria en un colegio de Pozo Cañada, han sido dados de alta este viernes, según han confirmado fuentes sanitarias a El Digital de Albacete.
Se trata de una glomerulonefritis estreptocócicas del grupo A. Una infección por bacterias que afecta a las anginas y que se puede propagar hasta el riñón, paralizando la capacidad de filtrar la orina, según explicaba Sanidad.
Salud Pública
El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través del Director General de Salud Pública y Consumo, Manuel Tordera, denuncia la irresponsabilidad en las manifestaciones de cargos públicos del Partido Popular respecto a los cuatro casos de Glomerulonefritis aparecidos en la localidad albaceteña de Pozo Cañada (Albacete), y que además han sido dados de alta en el día de hoy.
Tras una semana donde dirigentes del Partido Popular han estado alarmando injustificadamente sobre los cuatro casos de glomerulonefritis aparecidos entre población en edad escolar de la localidad albaceteña, el director general de Salud Pública da a conocer que tanto el Ministerio de Sanidad como sociedades científicas han mostrado su conformidad con las actuaciones llevadas a cabo por los técnicos y profesionales de la Sanidad de Castilla-La Mancha.
Así, desde el Centro Nacional de Epidemiología se recibió un documento felicitando por las correctas actuaciones llevadas a cabo y desde la Sociedad Castellano Manchega de Medicina de Familia y Comunitaria emitieron un comunicado donde estos instaban a políticos y medios de comunicación “a evitar difundir críticas hacia nuestro sistema sanitario basándose en opiniones personales y sin haber realizado un análisis riguroso del problema ni presentar los datos objetivos necesarios”.
Los técnicos y profesionales de la Sanidad de Castilla-La Mancha han continuado realizando su labor esta semana y gracias a ello se ha podido conocer los resultados de las muestras para detectar la presencia de estreptococos del tipo A entre la población del municipio albaceteño de Pozo Cañada, realizadas tras detectarse cuatro casos de glomerulonefritis en niños de la localidad, y que en su totalidad han sido dados de alta.
En total se han tomado muestras a 309 personas, la gran mayoría niños del colegio del municipio, con un resultado de 55 positivos.
Tal y como ha destacado el director general de Salud Pública, Manuel Tordera, se ha tomado la muestra a los niños del colegio, contactos de los cuatro casos detectados y profesionales del centro educativo. “Los positivos arrojan un porcentaje que se encuentra dentro de la horquilla habitual de población sana que porta la bacteria sin síntomas y que suele rondar de media en el 15%”, ha comentado Tordera.
Protocolo
Asimismo ha destacado que desde que Epidemiología recibió la notificación de los casos, el pasado miércoles 8 de marzo, se activó un protocolo de actuación y el mismo jueves 9 ya se estaban tomando las primeras muestras a los niños de las clases de los cuatro niños que habían ingresado. Estas muestras se terminaron de tomar el lunes y martes de esta semana, completando el total de niños del colegio.
Desde Sanidad se ha recordado que los niños que ingresaron lo hicieron a causa de una glomerulonefritis postestreptocócica, una complicación poco frecuente de estas infecciones. En este sentido ha insistido en que las infecciones estreptocócicas del grupo A son bastante frecuentes en la población infantil puesto que se contagia con facilidad a través de los fluidos como la saliva. La mayoría produce enfermedades relativamente leves como infección estreptocócica de la garganta, escarlatina o infecciones de la piel.
Para prevenir el contagio de la bacteria, desde la Dirección General de Salud Pública se insiste en extremar las medidas preventivas y de higiene, muy similares a las que se ponen en práctica ante infecciones respiratorias o gripe, como lavarse las manos frecuentemente con agua tibia, cubrirse la boca y la nariz cuando se va a estornudar e inmediatamente lavarse las manos o no compartir los cubiertos ni otros utensilios de comer o cocinar.
