/Sandra Manzanares/Vídeo: María Guerrero/
Se acerca el Jueves Lardero, un día en el que los albaceteños se comen la mona junto a amigos o familiares, y algunos, especialmente, los más jóvenes, acompañan el típico bollo con bebidas alcohólicas. Por ello, el Ayuntamiento de Albacete permitirá este jueves el botellón en el tramo de la Avenida de la Mancha que comprende el Paseo de los Estudiantes y el Camino de la Pulgosa. Una medida que los albaceteños han acogido de buen grado.
Y es que, como apunta Elena, se trata de algo “puntual”, para lo que le parece “bien” que el Ayuntamiento de posibilidades a la gente joven. Con ella coincide Mari Ángeles, que tiene una hija de 17 años y “sabe que va y se lo pasa bien”, aunque siempre con control, por lo que esta labor le parece “estupenda”. El hecho de que la zona esté habilitada a las afueras de la cuidad supone para los albaceteños un punto a favor pues de esta manera, los jóvenes “no molestan” a ningún vecino, y además están controlados por medios sanitarios y policía por si hubiera alguna incidencia. Así, José María, señala que como padre “se siente mejor” sabiendo que “alguien los está mirando mientras beben a que si beben solos”.
Cabe destacar que el horario del botellón será de 16:00 horas a 21:00 horas. Un horario “justo” para Pablo, pues al día siguiente es viernes, y los jóvenes “tienen que acudir a clases o a trabajar”. Una franja horaria “prudente”, opina Antoñita, que lo prefiere a que sea de madrugada pues hay “más peligros”.
Aunque el Ayuntamiento instalará 16 cabinas de aseos químicos y un dispositivo especial de limpieza, algunos vecinos han mostrado su preocupación por la suciedad que pueda generar esta práctica, por lo que algunos como Juan Miguel, destacan que debe haber “libertad, pero con responsabilidad”, y es que en algunas ocasiones las zonas de botellón quedan “demasiado sucias”.
Sin embargo, la mayor preocupación de los albaceteños es que pueda haber menores bebiendo. Esta es la “parte mala del botellón”, nos cuenta Manu, señalando que “no controla igual una persona de 20 años que otra de 15”. Algo en lo que coincide Alejandro, que está a favor de esta práctica para el Día de la Mona, pero en contra de que pueda “haber menores que no tienen el control sobre el alcohol y pueda afectarles”, detalla. Eso sí, en lo que todos coinciden es en pasar un buen día, pero siempre, con control.
