/Sandra Manzanares/Fotos: Pilar Felipe/
La Feria de Albacete 2.016 ya va tomando forma, y es que apenas unos días después de que las ‘Tascas’ se marcharan del Paseo de la Feria, los primeros feriantes se instalaban en su lugar.
Así, la noria, el tiovivo y el trenecillo empiezan a erguirse sobre el asfalto del Recinto Ferial, igual que dos míticos establecimientos frecuentados por muchos de los visitantes de nuestra Feria. ¿Quién no se ha comido una hamburguesa ‘Uranga’ o probado los churros de ‘La albaceteña’?
Falta poco para que quien todavía no lo haya hecho, pueda degustar alguno de estos productos o revivir las sensaciones de ver la Feria desde el punto más alto de la noria, a nada más y nada menos que 53 metros del suelo.
Y es que, el 1 de septiembre, coincidiendo con el concierto de Raphael, es el día en el que tanto ‘Hambuesas Uranga’ como ‘La albaceteña’ quieren abrir sus negocios. A la espera de esta fecha, Carolina García Muela, hija de la dueña de la churrería, ultima los preparativos tras una semana de montaje del puesto y del acondicionamiento de una maquinaria compuesta por frigoríficos, amasadoras, y fogones.
Este proceso viene haciéndolo la familia de Carolina más de 40 años, que son los que llevan trabajando en la Feria de Albacete. Ella, junto a sus hermanos forma parte de la tercera generación a cargo de un negocio que emplea cada día de Feria más de 300 kilos de harina para confeccionar sus productos.
Coincidiendo con la albaceteña, uno de los propietarios del tiovivo ‘Hermanos Tortosa’, Pedro Tortosa, espera que su atracción esté en funcionamiento a mediados de semana, porque a pesar de que tan solo en un día la instalación puede estar terminada, necesita pasar unos controles y obtener los permisos pertinentes para su puesta en marcha.
Una semana de montaje para la noria
Por otra parte, tenemos a la ‘Noria Sánchez’, cuyo montaje es más complejo. Y es que, como explica el encargado de la atracción, Florin Crezu, 6 operarios trabajan alrededor de 9 horas diarias durante casi una semana para que no quede ningún cabo suelto. En este proceso los trabajadores unen los 48 vagones de colores que componen la noria a su esqueleto a través de “unos 1.500 tornillos”.
De esta manera, Florin espera que la atracción, cuyo aforo máximo es de 192 personas, esté preparada para su apertura el día 3, o el 5 de septiembre a lo sumo.
Perfil de los clientes
Cualquier edad es buena para disfrutar en las atracciones, y es que, aunque “los tiempos están cambiando y un niño de cinco años se cree que es mucho más mayor que antes uno de diez”, Pedro destaca que hay cosas que siguen igual, y que el perfil mayoritario todavía es “el del niño pequeño acompañado por sus padres o abuelos”.
Algo similar ocurre con la noria, el encargado de la misma señala que “lo que más viene es gente joven”, pero que “hay de todo”. Igual que en la churrería ‘La albaceteña’, o en ‘Hamburguesas Uranga’, cuyo perfil es variado, y “muy fiel”.
Lo más demandado
Lo que sí tienen claro tanto Fernando Bañuls, marido de la propietaria de ‘Hamburguesas Uranga’, como Carolina, de ‘La albaceteña’, son sus productos estrella.
Así, Fernando, destaca la especialidad de la casa, la ‘hamburguesa Uranga’ de carne de buey como lo más demandado y se refiere a la popularidad de las mismas diciendo que “si no terminas la Feria tomándote una hamburguesa Uranga no has terminado la Feria”.
Por su parte, Carolina señala que dependiendo de la hora se vende más una cosa u otra haciendo referencia a que a primera hora de la tarde “se da más el churro fino”, el llamado ‘madrileño’; mientras que a media tarde “lo que pide la gente son los buñuelos” y a partir de medianoche, “cuando se hacen los bailes de las casetas”, lo que más se venden son las porras, todo ello acompañado con su “chocolatito correspondiente”.
Expectativas para la Feria
A pesar de que “llevamos tres o cuatro años un poco flojos, esperamos que éste se dé mejor que los anteriores, ya que cae en dos fines de semana”, apunta Pedro, que, por cierto, es hijo de feriantes valencianos y nacido en nuestra ciudad en plena víspera de las fiestas.
En cuanto al precio de las entradas, “está aún por determinar”, puesto que normalmente, los feriantes “llegan a un acuerdo” para fijar un precio que oscile en el baremo recomendado por el Ayuntamiento y los propios trabajadores ambulantes.
Por ello, “tenemos que jugar entre una cosa asequible para el público y beneficioso para nosotros”, señala Pedro Tortosa que nos recuerda que el año pasado en su atracción el ticket costaba 3 euros.
Nuestra Feria, de las más importantes
Finalmente, los feriantes reconocen y coinciden en que la Feria de Albacete “es una de las mejores de España”, como apunta Pedro, incluso “de las tres más importantes”, para Florin.
En esta línea, Carolina siente que nuestra Feria es “emblemática”, y Fernando nos desvela que, tras 37 años de venir a la ciudad, y después de recorrer España entera, nombra a la Feria de Albacete “cada vez que me hacen una entrevista en cualquier sitio al que vamos”.
Y es que no solo todo aquel que viene a disfrutar de la Feria, vuelve a hacerlo en más ocasiones, sino que a nuestra Feria la “llevan a gala” también los que trabajan en ella.
