El Juzgado de lo Penal Tres de Albacete ha condenado a un hombre como autor de un delito de atentado con instrumento peligroso a 1 año de prisión, con aplicación de la medida de libertad vigilada consistente en sometimiento a tratamiento médico externo durante un año.
La Sala ha estimado además condenar a la misma persona por un delito de conducción temeraria y dos delitos de lesiones imprudentes a la pena de dos meses de prisión que se sustituye por una multa de 720 euros. Así como la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante cuatro meses.
Deberá de entregar a los perjudicados las cantidades consignadas en el Juzgado por la aseguradora: 1.607,51 euros a la Dirección General de la Policía y Guardia Civil; 385,89 y 98,21 euros a las dos personas que sufrieron lesiones por la conducción del acusado.
Hechos
La sentencia a la que ha tenido acceso El Digital de Albacete establece en sus hechos probados que en la localidad de Tobarra, sobre las 12:30 horas del 5 de febrero de 2010, el entonces acusado “circulaba por el camino de Isso de la referida localidad, conduciendo una furgoneta de su padre en dirección a una parcela particular, dónde detuvo el vehículo, momento en el que la Policía Nacional, que circulaba con el vehículo camuflado, se apeó del mismo y se dirigió identificándose como tal al acusado”. Acto seguido, el ahora condenado, detalla la sentencia, “embistió con la furgoneta en dirección al agente, quién pudo esquivar al acusado que logró zafarse del control policial circulando en dirección a la Avda. de la Constitución”, éste fue perseguido en su huída por los agentes “quienes le lanzaban señales acústicas y luminosas para que detuviera la marcha, haciendo caso omiso, que continuó con su conducción por el casco urbano de Tobarra, llegando a colisionar con los vehículos policiales que le perseguían, continuando la marcha poniendo en grave peligro la vida y la integridad física de los viandantes que transitaban las calles y de los conductores de los vehículos que encontraba a su paso, ignorando las señales de tráfico”.
Explica la sentencia que llegó a circular en dirección prohibida por una calle, “obligando a apartarse a los conductores que circulaban de frente e impactando contra un turismo que no pudo esquivar al acusado, no deteniendo el vehículo, sino que continuó colisionando contra un segundo vehículo”.
Debido a la conducción desarrollada por el acusado varias personas sufrieron lesiones que reclaman por ellas.
El condenado, detalla la sentencia, tiene un “trastorno de personalidad de tipo esquizoparanoide grave, una dependencia grave a la cocaína y heroína y abuso de cannabis, lo que supone que tenía gravemente afectada su capacidad de comprender la ilicitud de los hechos y actuar conforme a dicha comprensión”.
