OPINIÓN | Mentiras y desinformación

Rajoy, el que era Vicepresidente del gobierno cuando Aznar se empeñó en apoyar una guerra ilegal como la de Irak, a partir de mentiras y desinformación, nos dijo esta semana que aún no se había leído el informe Chilcot, ni tan siquiera los resúmenes que enseguida se habían publicado en todos los medios nacionales e internacionales. Difícilmente puede creerse que no lo conocía.

El pasado día 1 de julio, cuando muchos españoles estaban haciendo las maletas para iniciar las vacaciones, Rajoy anunció que tenía que hacer de nuevo una “saca” del Fondo de Reserva de las Pensiones, por valor de 8.700 millones de euros. Volvía a mentir. El saqueo se había consumado mucho tiempo antes. Los pensionistas habían cobrado su pensión con la paga extraordinaria el día 25 de junio lo que conllevaba que las nóminas se habían generado varias semanas anteriores. Es decir, que la necesidad de hacer uso del Fondo de Reserva se había generado mucho antes del día 1 de julio, pero no convenía hacerlo público durante la campaña electoral. Otra mentira y desinformación perpetrada.

Rajoy no para de decirnos que la situación está mejorando como lo demuestra la creación de empleo. Pero vuelve a darnos un titular falso que no genera esperanza. Se acaba de hacer público, que los contratos con la duración de un día, se disparan pasando de 17.700 en el primer trimestre de 2008 a 35.800 en el mismo período de 2016, lo que se traduce en una subida del 102 %, según datos del Instituto Nacional de Empleo (INE). Además de enero a mayo, la contratación por un período de siete días o menos aumentó su peso dentro de la contratación temporal y representa ya el 26,5 %, casi un punto y medio más que hace un año y la duración media de los contratos temporales mengua, quedando en 51,93 días.

El empobrecimiento de la recaudación de la Seguridad Social es palmario. El número de cotizantes creció un 2,73% mientras la recaudación lo hacía el 1,94%. Entre enero y marzo de este año las cosas siguen igual, la recaudación por cotizaciones ha crecido un 1,94% en tanto que el gasto en pensiones lo ha hecho en un 3,22%. Otra mentira y desinformación perpetrada.

Abundando en la mentira de la insostenibilidad de las pensiones, que hay que recordad que tienen sus antecedentes en el Retiro Obrero Obligatorio de 1919, impensable sin las luchas sindicales de la CNT y de la UGT de entonces, debemos revisar el Pacto de Toledo y recuperar los impuestos, la Hacienda Pública, para que las pensiones dejen de ser un concepto estanco y ajeno al Estado, que solo dependa de cotizaciones, porque a partir del argumento de que deben ser sólo los trabajadores quienes paguen sus pensiones con sus cotizaciones sociales se estructura el discurso de la inviabilidad futura de las pensiones públicas, sobre el razonamiento manido del envejecimiento de la población, y se abre el camino hacia su supresión y la privatización de las mismas.

Porque como recuerda el sociólogo Jean Paul Marat: “El derecho a una pensión pública, asegurada y digna para cada trabajador/a no debe depender en modo alguno de sí mismo/a, ni de los avatares de las coyunturas económicas sino que ha de ser una cuestión obligatoria, nunca potestativa de los gobiernos de turno, un asunto del mismo Estado que dice garantizar derechos que no cumple. Ha de ser un derecho básico y obligatorio de toda persona que trabaja y, más allá aún, de todo ser humano porque, de lo contrario, no hay modo de garantizar su dignidad como persona ante su vejez”.

Tras el resultado de las elecciones del 26J, Rajoy, este creador de mentiras y desinformaciones, es el que debe intentar sumar para que los datos le den la investidura y lo debería hace a partir de su entorno ideológico, Ciudadanos, los nacionalistas vascos y catalanes y Coalición Canaria. Es posible que con los nacionalistas vascos, en vísperas de las elecciones de aquel territorio, les sea difícil entenderse. Con los nacionalistas catalanes, con los que en otros tiempos hablaban catalán en la intimidad, las posibilidades de acuerdo son imposibles. Al final pueden sumar 170, sus 137 más los 32 de Ciudadanos más 1 de Coalición Canaria. El no a Rajoy puede sumar 180.

¿Bloqueo? Si llegaran a esa situación, Pedro Sánchez debería intentar sumar una mayoría de progreso y de cambio, a la que a efectos de investidura se sumaran todas las fuerzas políticas que dicen no a Rajoy, no a las mentiras y desinformaciones perfectamente perpetradas.

A nivel ideológico, mientras Unidos Podemos sigue en busca del voto perdido, que algo tendrá que ver con la soberbia y prepotencia de su líder y con la campaña electoral realizada, el PSOE, más allá de satisfacciones forzadas por haber resistido el sorpasso, deberá terminar de comprender los cambios sociales que se han producido y adaptar sin miedo sus proyectos a esa nueva situación, y como acertadamente escribió Soledad Gallego: “sin perder al mismo tiempo de vista sus objetivos tradicionales de lograr una mayor igualdad y justicia. Tiene que ser capaz de combinar políticas decididamente antiausteridad y decididamente proeuropeas. Tiene que estudiar y ver qué es aprovechable en España del interesante programa económico elaborado por el ministro laborista en la sombra John Mc Donnell. Tiene que ser capaz de examinar sin prejuicios propuestas de otros ámbitos como la renta básica universal o mecanismos para aliviar los efectos políticos de una población envejecida, incluido el voto a los 16 años o la incorporación de inmigrantes que adquieran en plazos relativamente cortos derechos políticos. Tiene que tener la audacia de preguntarse, como escribe Jochen Bittner, en la revista alemana Die Zeit, hasta qué punto el escepticismo creciente sobre la democracia está justificado.”

Ante las mentiras y desinformaciones pertrechadas, hay alternativas que pueden recuperar derechos a las personas y dignidad a la política. 

Gerardo Gutiérrez Ardoy

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