“Del cabreo a la resignación” en Albacete, cinco años sin humo

/Llanos Esmeralda García/

Casi tenemos ya en el olvido la imagen de los albaceteños fumando dentro de bares y restaurantes, de las máquinas expendedoras que formaban parte de la decoración de los establecimientos y de volver a casa con ese característico olor que se impregnaba en la piel. Cinco años harán este próximo mes de enero de que entrara en vigor la ley antitabaco en España y que ahora establece una escena bien distinta en la que los consumidores de tabaco salen de los locales para encenderse un cigarrillo. Pero, no sólo ha sido un cambio en el comportamiento de los consumidores de nicotina sino que para los hosteleros han sido cinco años en los que han tenido que pasar del cabreo inicial a la resignación de una ley que cumplen a raja tabla. La ley propició la obligatoriedad de separar espacios en los establecimientos entre fumadores y no fumadores, afectando a todos con más o menos metros cuadrados, viendo como otros pocos tenían que colgar el cartel de  “fumador” o “no fumador”, “al principio tuvimos un cabreo muy gordo, antes incluso de instaurarse la ley, porque se hicieron unas inversiones, unas reformas para adaptar los establecimientos y separar espacios de fumadores y no fumadores, que luego no sirvieron de nada”, ha detallado el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Albacete, Juan Sánchez.

Una separación de espacios que no sirvió de nada puesto que la ley prohíbe el humo en los establecimientos públicos, por eso ha insistido Sánchez sentirse “doblemente cabreado” puesto que después de las reformas el cliente ha tenido que acatar que no se pueda fumar dentro de los establecimientos con lo que “ha habido que crear unos espacios en la calle durante invierno y verano, con la consiguiente proliferación de las terrazas para que los clientes siguieran viniendo a bares y restaurantes”.  Unas terrazas que para algunos restaurantes de la ciudad suponen un problema como explica Sánchez “porque antes las sobremesas se alargaban y ahora se han perdido, con lo que hacen que acaben marchándose a un establecimiento que tenga un espacio donde poder fumar”. Un problema resultado del surgimiento de las terrazas en las calles durante todo el año, así lo ha manifestado el presidente de APETH “por el mero hecho de salir a fumar se ha detectado la proliferación de más ruido al haber más gente en la calle”.

En la memoria quedan las manifestaciones y protestas que hubo a finales de 2010 en Albacete como respuesta a la decisión del Gobierno de una ley que inducía al pesimismo. “En estos cinco años el cliente se ha adaptado y la ley se está cumpliendo, aunque nos ha originado y nos está originando problemas” como ha detallado Sánchez aunque insiste en que “en líneas generales no han trascendido muchas sanciones a los establecimientos albaceteños”.

Consumo

El consumo de tabaco representa la primera causa evitable de muerte en España y además es uno de los principales problemas de salud. En este sentido, en Albacete juegan un papel importante los servicios sanitarios como la Unidad de Abordaje del Consumo y Dependencia del Tabaco; la Unidad Especializada en Tabaquismo; la Unidad de Conductas Adictivas y la Unidad de la Asociación Española Contra el Cáncer, desde donde se ofrece ayuda profesional a los fumadores que quieren dejar este hábito. Así, el presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer de Albacete, Andrés Sánchez ha incidido en que ha habido un cambio en la manera de fumar a lo largo de este lustro, sustituyendo las cajetillas de cigarrillos por tabaco de liar y ahora al cigarrillo electrónico “bajó el consumo de tabaco en Albacete con la ley antitabaco aunque ahora lo que se está percibiendo es que aquellas personas que dejaron el hábito del tabaco a través de los cursos de deshabituación que hacemos, ahora, están volviendo al consumo a través de los cigarrillos electrónicos porque muchos no saben que también llevan nicotina”. El presidente de AECC de Albacete apuesta por un cambio en la normativa vigente “al igual que hubo un pronunciamiento y una regulación del tabaco, que también haya otra regulación del cigarrillo electrónico con el fin de que no retrocedamos en los éxitos conseguidos en materia de salud”.

El consumo diario de la población general aumentaba así pasando de 34,5% por encima de la media estatal, según fuentes del SESCAM, aunque el presidente de AECC de Albacete insiste en que “nosotros estamos percibiendo que los ciudadanos de Albacete fuman menos porque la ley lo que ha supuesto es un impedimento para que el fumador desarrolle su “actividad” donde precisamente pedíamos que no se hiciera, como en los lugares cerrados y los centros de trabajo”.

El Digital de Albacete

Diario digital líder en Albacete con toda la información de la capital y provincia
Botón volver arriba