OPINIÓN | Es la voluntad política, por Gerardo Gutiérrez

ES LA VOLUNTAD POLÍTICA

La política es una actividad orientada ideológicamente a la toma de decisiones de un grupo para alcanzar ciertos objetivos. También puede definirse como una manera de ejercer el poder con la intención de resolver o minimizar el choque de intereses que se producen dentro de una sociedad.

Aunque haya pocos recursos, es a base de “voluntad política” cuando pueden conseguirse resultados satisfactorios, a la hora de resolver ese choque de intereses entre los que detentan el poder de verdad y los que lo sufren.

Y a base de “voluntad política” en Castilla la Mancha se ha puesto en marcha un Programa de Asistencia, Asesoramiento e Intermediación Hipotecaria.

Esta intervención de la Administración Regional, es una iniciativa que ha nacido a partir de las demandas del tejido social, teniendo en cuenta el drama que representa la pérdida de la vivienda habitual, que lleva consigo el riesgo de exclusión residencial para muchas familias de Castilla la Mancha.

Es con el Goliat del sector bancario, con el que se pretende mediar en favor de la ciudadanía.

Sí, ese sector que ha recibido más de medio billón de euros para su rescate y saneamiento en nuestro país, a través de medidas de capitalización, ayudas fiscales, participación en preferentes convertibles, avales del Estado a la emisión de deuda bancaria, compras de activos de la SAREB (el Banco malo) y hasta préstamos del Banco Central Europeo al 1%, para que luego las entidades bancarias compraran deuda pública al 5% o más como en el caso de Grecia.

Esa otra parte con la que hay que mediar, es la que por boca de sus representantes, desinforman e intoxican hablando, por ejemplo de la Banca Pública, con declaraciones del tipo: “La experiencia es mala. Puede existir alguno que funcione bien, pero no es probable”, afirmó Luis María Linde, el presidente de la patronal bancaria AEB o por el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, “No conozco ningún banco público que sea sostenible en el tiempo”.

Pues claro que hay casos sostenibles y viables en el tiempo, como en Alemania donde hay quince bancos regionales cuyos propietarios son los respectivos gobiernos federales y cuya deuda está garantizada por el Gobierno Central alemán o en Francia que mantiene como públicos a  “la Caisse des Dépôts” , que entre sus objetivos tiene la inversión de 8.000 millones de € hasta 2017 para impulsar la capacidad de innovación y exportación de las empresas francesas y la Banque Postale”, con más de 10 millones de clientes. Y otros muchos ejemplos de bancas públicas similares como en Italia, Suiza, los Países Bajos, países Nórdicos y el caso paradigmático de Dakota del Norte en EE.UU. en el  que el Estado deposita todos los ingresos que recibe con el objetivo de impulsar su economía y tiene prohibido invertir fuera del estado y dedicarse a actividades financieras especulativas.

Esa otra parte con la que hay que mediar, es la que según la ADICAE, (Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros) ofrece el crédito en España un 43% más caro, con un interés de media al consumo de un 9,79%, frente al 5,59% en la UE y que fuerzan el pago de intereses abusivos y mantienen las cláusulas suelo, hasta que la magistratura se lo tumba.

Esa otra parte con la que hay que mediar, es la que ha despedido también a 60.000 personas de sus oficinas y está preparando una nueva reducción de personal, despidiendo a otras 30.000 personas, aprovechando las bondades de la reforma laboral, que planteó el Gobierno de Rajoy de la mano de FEDEA, el lobby de economistas del sector bancario.

Esa otra parte con la que hay que mediar, permite que teniendo tres hipotecas una familia sobre su vivienda, su negocio y una nave, sea contra la vivienda contra la que primero proceden en ejecución de hipoteca o que a una empleada de hogar con sus exiguos ingresos, le concedieran en su día 150.000 euros de préstamos hipotecario que, como es normal, ahora no puede devolver, o que por 8.000 euros, se pretenda ejecutar una hipoteca sobre una vivienda que está valorada en más de 100.000 euros…

A este programa, que se ofrece en las dependencias de las Direcciones Provinciales de la Consejería de Fomento, a través de personal funcionario, se han sumado el Colegio de Trabajadores Sociales, aportando a seis profesionales, cuyos salarios son subvencionados por la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, siendo éste el único gasto, y los Colegios de Abogados, en los que se ha constituido un turno especial, para asesorar e intervenir de forma altruista. Aprovecho la ocasión de este artículo también para valorar muy positivamente su implicación.

Es la “voluntad política”, la que ha propiciado que este Programa se ponga en marcha y dé respuesta a muchas personas que encuentran ahora que, desde lo público, se les apoya en sus relaciones desiguales.

Es justo reconocer que varias entidades financieras están negociando con el Gobierno Regional para colaborar con este Programa. Pero no es menos cierto que arrastran dificultades de imagen, por un lado, y económicas por otro, ya que se encuentran con problemas al tener sobredimensionadas en el pasivo, una gran cantidad de viviendas que se han adjudicado a partir de desahucios, en comunidades de propietarios en las que no abonan ni los gastos de comunidad. Habrán hecho sus cuentas y saben que en esa negociación con una institución como la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, que es el sujeto económico del que depende en gran parte el PIB regional, tienen más que ganar cooperando.

Ahora con el Gobierno Regional de su lado la gente sabe que, en parte, se equilibra la desigualdad de partida.

Parafraseando a un famoso asesor de Clinton, “es la voluntad política, estúpido, es la voluntad política”.

Gerardo Gutiérrez Ardoy

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