/Conchi Ruescas/ Fotos: Pilar Felipe/
Nadie puede marcharse de la Feria de Albacete sin “feriarse” algo. Una tradición, que según hemos comprado en El Digital de Albacete, los albaceteños siguen al pie de la letra. Dando una vuelta por los puestos, los feriantes nos dicen que hay artículos para todos los gustos y bolsillos. Algunos son tradicionales, ¿quién no viene a la Feria de Albacete y se lleva una navaja? pregunta Manuel Álfaro, encargado del puesto de navajas y cuchillos, “todo esto de las navajas de Albacete la verdad es un detalle que la gente siempre se suele llevar. Eso si, todos dicen que hay que regalarlas pero aún así para feriarse es un artículo que se lleva mucho”. Según este joven, “si no vendemos ahora navajas, ahora o nunca” y aunque no sabe exactamente de dónde viene esta tradición, si que recuerda que cuando era niño, ahora tiene 24 años, en su casa también cumplían con la tradición de feriarlo.
Por los redondeles está Máxima Rodríguez que se ha feriado un bolso “y voy ahora a comprar una navaja para las patatas”. Máxima es de Pozohondo pero lleva viviendo en Albacete 50 años y cumple, cuenta, con todas las tradiciones de Albacete como la de feriarse.
También cumplen con esta tradición Feliciano Espiona, su mujer y su suegra, “yo no soy de aquí, soy de Sevilla, pero si es verdad que ellos lo llevan muy a cabo, es una tradición que tienen en casa”. Por eso, han venido a la Feria para feriarles algo a los niños, “pues estamos viendo, yo quiero comprarles algo que sea más didáctico, que juguetes tienen mucho”.
En los puestos hay una gran variedad de artículos, el de Sergio Fran Gomez es de bolsos y carteras. Es de Valencia y es el tercer año que está en la feria de Albacete y para él este año “hay menos gente, la gente “mira, compara, a lo mejor compran mañana”. Aquí podemos encontrar artículos desde los tres hasta los quince euros. Tampoco es muy optimista Rafael Bustos, de Santa Cruz de Mudela, Ciudad Real. Esta feria cumple 50 años en Albacetey según este feriante, “la feria fatal, está fatal la venta, el sábado sobre todo mucha gente pero el negocio mal, esta es la feria más importante que hacemos y está la cosa floja”.
Pero siempre hay quien compra algún detalle porque “las tradiciones hay que cumplirlas” como es el caso de María Ángeles Aguilar, quien se confiesa “muy de la feria, soy de la Peña El Templete, venimos a feriarles algo a los niños y a nosotros, también los mayores, siempre hay que feriarse algo”. Está buscando algo para sus nietos “que a la vez interactúen, jueguen, se diviertan pero también aprendan”. A ella ya la han feriado “una joyica, lo típico”.
De la misma opinión es Ginés Aroca, “es una tradición de toda la vida, siempre hemos comprado algo, tenemos la mejor feria del mundo, si vienes a la feria y no compras nada es como no venir a la feria”.
Este fin de semana ha sido bueno, explica Juan Vargas, de Benidorm, “aunque en la feria se nota la crisis, hay muchísima gente, el comercio hemos trabajado muy bien sábado y domingo pero ahora está flojito”. Este es el cuarto año que viene a vender a Albacete, “estamos en la mejor feria de España, la gente que viene dice que es la mejor”.
Yolanda y Sonia Guisado, son dos hermanas que vienen a feriarse “un anillo y una pulsera, todos los años venimos y nos compramos algo, parece que si no te compras algo en la feria te falta algo”. Como hay hay muchos puestos, primero dan una vuelta, “hacemos un reconocimiento, nos vamos quedando con lo que más nos gusta y luego ya decidimos ir a un sitio u otro”.
Lilian Navarro es un joven argentino que está al frente de un puesto de collares y pendientes, entre otros complementos, “hay que feriarse aunque este año está la cosa un poco rara, pero es normal, la gente suele esperar a los últimos días que hay rebajas pero bueno, nosotros estamos aquí luchando”. Lo que más venden son pulseras y anillos, “hay para todos los gustos”. Precisamente en este puesto está Flugencia Núñez, hoy cumple 91 años y está probándose pulseras, le gusta darse una vuelta por los puestos y de momento, “estoy mirando, es que no me hace falta nada”. Está con su hija Marcelina Tarancón, “yo ya me he feriado, me pierden la madera de bosque”.
Al lado de ellas está María José Pérez Segovia, “he venido a ver si me gusta algo comprarlo y si no, me voy a mi casa igual que he venido, siempre te gusta comprarte algo y comprarle a los hijos y a los nietos, yo he venido a comprarme unos pendientes de manchega pero no encuentro”. Por su parte, Julia Azaña ha venido a feriarse platos para la parcela.
Entre los feriantes vemos a Joaquín Martíinez. Joaquín representa cuatro generaciones de feriantes valencianos en la Feria de Albacete con su puesto de bastones “que también es lo tradicional de aquí de Albacete, bastones de colección, también la cubertería en madera especial que no se pone negra”. Respecto a los precios “estamos vendiendo con los mismos que hace siete años pero son variables, un bastón de niño unos dos euros, luego están lo de colección”. Joaquín señala que las ventas están un poquito flojas pero “dentro de la línea que es la Feria y las circunstancias”.
