/Javi Romero y Hugo Piña/
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Esta romería, única en España, lucha por ser declarada de Interés Turístico Nacional.
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La Llevada aglutina andarines de todas las edades y sexos, la mayoría por tradición familiar y promesas u ofrecimientos.
Como manda la tradición, el 28 de agosto ha sido devuelto a su ermita el Santo Cristo del Sahuco, que desde el Lunes de Pentecostés se encontraba en la Iglesia de Peñas de San Pedro.
Miles de personas se han dado cita en la cruz de salida de las Peñas para despedir a este venerado Cristo, tras la misa celebrada a las 6 de la mañana. Con los habituales vivas y ¡Palmas gandules! el Cristo era introducido en la caja de madera ante la emocionada mirada de jóvenes y veteranos.
Tras este emocionante momento cientos de andarines portaron la venerada imagen desde las Peñas de San Pedro hasta la ermita del Sahúco, recorriendo aproximadamente los 15 kilómetros de distancia que separan estos dos puntos. Antes de la salida algunos andarines nos comentaban que la fe y la devoción hacían mas liviano el recorrido.
El amanecer y el precioso marco natural de la travesía nos dejaron imágenes para el recuerdo de una tradición que lucha para conseguir un merecido reconocimiento, ser declarada de Interés Turístico Nacional. Testigo de ello fueron medios locales, regionales y nacionales que no faltan a la cita.