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El concejal ha comprobado que los jornaleros y los inmigrantes viven en módulos prefabricados, sin aire acondicionado, sin ventanas para que corra el aire y con las puertas rotas.
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“Los baños están sucios, huelen mal, el suelo está podrido debido a la humedad y los usuarios pueden herirse porque hay zonas con hierros oxidados”.
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“El alcalde, Javier Cuenca, no se preocupa por este servicio, y la concejala de Acción Social, María Gil, solo aparece por las instalaciones para hacerse la rigurosa fotografía”.
Pedro Soriano, concejal en el Ayuntamiento de Albacete, ha visitado recientemente el campamento de La Dehesa. Ha comprobado que los inmigrantes y los jornaleros viven en unas condiciones inhumanas. “El alcalde, Javier Cuenca, no se preocupa por este servicio, y la concejala de Acción Social, María Gil, solo aparece por las instalaciones para hacerse la rigurosa fotografía. Lo hizo hace un mes en su inauguración, previa limpieza del recinto para dar buena imagen de cara a los medios de comunicación. A ambos les falta empatía”, ha asegurado.
El concejal ha “comprobado in situ” que los jornaleros y los inmigrantes “viven en módulos prefabricados, sin aparatos de aire acondicionado, sin ventanas para que corra el aire y con las puertas rotas y atadas con plásticos para que no se cierren”. “Con las altas temperaturas y las olas de calor de este verano es inhumano que la gente permanezca en el interior de los dormitorios. No pueden descansar, por ejemplo, cuando llegan de trabajar”, ha dicho. Al respecto, Pedro Soriano ha propuesto que se instalen toldos encima de estos barracones para reducir los efectos del calor, así como en otras zonas del recinto porque hay pocos espacios con sombra. Se presentará un escrito al Ayuntamiento de Albacete.
Pedro Soriano se ha percatado en su visita que en el campamento de La Dehesa “hay más problemas”. Como los nuevos baños de obra no se terminaron de construir este año, continúan los tradicionales barracones de metal. “Estas zonas están sucias, huelen mal, el suelo está podrido debido a la humedad y los usuarios pueden herirse porque hay hierros oxidados”, ha denunciado. Otros espacios en malas condiciones, según el concejal, son los dos comedores, debido a que el suelo está hundido, y la sala polivalente, donde se ha instalado un aparato de aire acondicionado, pero con una potencia insuficiente.
Soriano también ha denunciado “la ausencia de seguridad privada”, para solucionar cualquier problema de convivencia que surja entre los usuarios, así como de personal para satisfacer las necesidades de los jornaleros e inmigrantes. Según ha explicado el concejal, en algunos turnos de trabajo, solo hay una persona a cargo del campamento para resolver cualquier incidencia. Ha recordado que otros años el Ayuntamiento mantenía un convenio con Cruz Roja Española, con el que enfermeros y ATS visitaban el campamento dos o tres veces por semana para realizar curas, pero en la actualidad no se mantiene. “De esta responsabilidad se hace cargo tanto la trabajadora social como la persona que trabaja para la asociación ACCEM y no están cualificados”, ha contado.
A estos problemas, se suma “una invasión de avispas en el recinto”. Se cuelan por los dormitorios y los baños y generan malestar a los usuarios. Es debido, según se ha comprobado, a unos avisperos que hay en uno de los muros del campamento. “Nadie aporta una solución y la situación es molesta”, ha asegurado.
Para finalizar, el concejal también ha propuesto que se instale una estación de préstamo de bicicletas gratuito en las inmediaciones del cementerio de Albacete, para que la gente pueda trasladarse a la ciudad más rápidamente y no a pie. “Javier Cuenca y María Gil deberían preocuparse más por las carencias de este servicio. Los inmigrantes y los jornaleros del campamento de La Dehesa están aislados de Albacete y esto no contribuye a su integración social”, ha dicho.
