Castilla-La Mancha exportará a final de este ejercicio productos por valor de 6.070 millones de euros, lo que implica un crecimiento del 13,7 por ciento respecto a lo que las empresas de la región vendieron en mercados exteriores el pasado ejercicio, cuando las ventas externas alcanzaron los 5.340 millones.
Así lo ha avanzado este jueves el director territorial del Instituto Territorial de Comercio Exterior (ICEX), Pedro Antonio Ruiz Morejón, durante el desayuno informativo que ha ofrecido para dar cuenta de la economía internacional de Castilla-La Mancha en 2014-2015 y en el que ha avanzado las previsiones que maneja para este año.
No obstante, ha advertido de que el saldo comercial de este ejercicio será negativo, pues la región importará, sobre todo en tecnología, por valor de cerca de 7.000 euros, lo que dejará un déficit de 930 millones de euros.
SECTORES
Tras precisar que el margen de error de estas previsiones es del 2/3 por ciento, Morejón ha defendido que estos datos evidencian una “senda de crecimiento constante”, de la que va a ser difícil separarse, porque “la empresa en Castilla-La Mancha ha aceptado que las exportaciones son un mercado más”.
A nivel provincial, ha asegurado que las exportaciones han crecido en todas las provincias, incluso en la de Albacete, que a pesar de ser una zona muy comercial por su cercanía a Levante, ha presentado tasas de crecimiento negativo durante la crisis y podría cerrar el ejercicio con un volumen de ventas de 800 millones.
Ciudad Real, por ser la más vitícola, es la provincia que mayor volumen exportador presenta, con cerca de 1.840 millones de euros, seguida de Guadalajara, con 1.580 millones, Toledo, con 1.470, y Cuenca con 380.
SECTORES, MERCADOS Y LAS EMPRESAS
A renglón seguido, ha indicado que todos los sectores productivos de la región terminarán con saldos positivos, excepto el de plásticos y químicos, y aunque ha explicado que el ICEX no está autorizado para dar datos sobre empresas concretas, sí ha aludido a la comarca de Puertollano, alertando de que las pocas empresas de producción energética que hay en la región “están arrojando valores negativos”.
Especial mención ha hecho también al sector del vino, producto “estrella” del sector agroalimentario de la región, que a pesar de ello está sufriendo precios muy bajos que se traducen en un bajo crecimiento.
En cuanto a los mercados en los que las empresas de la región colocan sus productos, los países vecinos como Portugal y Francia, y los del entorno europeo siguen siendo los clientes más fieles, pues demandan cerca del 70-80 por ciento de la producción, aunque ha destacado que está creciendo el número de empresas que están empezando a tener mayor presencia en mercados tan difíciles como el de Estados Unidos o Japón, donde entrar es todo un “reto”.
El responsable territorial del ICEX ha precisado que en el caso del mercado chino, que hace años era todo un potencial, las empresas de la región están empezando a “replegar velar”, por tener unas reglas de juego “muy feroces” y muchos problemas en cuanto a la defensa de patentes.
Respecto a las empresas, ha destacado que ha crecido por encima de las ratios habituales el número de ellas que se mantienen en los mercados externos, que es lo difícil, pues ha alertado de que entre el 40 y el 60 por ciento de las empresas que se arriesgan a salir de las fronteras nacionales no repiten al año siguiente, quizá por motivos como el crecimiento de la demanda interna.
“Por ello no solo debemos animar a las nuevas empresas a que exporten sino a que se consoliden en el exterior, que estén dos o cuatro años y que tengan un porcentaje de exportación estable”, ha dicho Morejón, que ha precisado que las administraciones están para ayudar y solucionar los problemas que las empresas encuentren fuera de España.
Tras indicar que son las empresas industriales las que mayor crecimiento están experimentando en el exterior, ha admitido que son las del sector agroalimentario las que más subvenciones reciben a la hora de exportar, tal vez por la “masa empresarial que hay detrás de esos sectores”.
IMPORTACIONES
En cuanto a las compras que Castilla-La Mancha hará de otros mercados, el responsable territorial del ICEX ha indicado que el volumen llegará a los 7.000 millones de euros y que sobre todo están creciendo las importaciones de material tecnológico, algo que a su entender es “bueno” porque implica que la empresas quieren remozar su aparato productivo, signo de la reactivación de la economía de la región.
No obstante, el ICEX prevé el empeoramiento del saldo comercial en la región, que cerrará el año con un déficit de 930 millones de euros, al ser mayor el volumen de exportación.
CONCLUSIONES
Una vez desgranadas las cifras, Morejón ha indicado que entre los retos de las empresas de la región se encuentra el de incrementar su oferta exportadora, especialmente en mercados aún por consolidar como son el del norte de África y Asia, y trabajar por la marca y la calidad de los productos.
Sus recomendaciones se han dirigido también al sector del vino, que quizá necesite comprender que no se trata de exportar mucha cantidad, sino de mejorar su precio en el exterior, pues las bodegas de la región está vendiendo el litro a poco más de 33 céntimos de euro cuando hay otras regiones que lo colocan al precio del vino de Burdeos.
Morejón también ha sugerido a las empresas que se lancen a promocionar el idioma castellano desde Toledo, “un sitio magnífico” para hacerlo, a fin de atraer a posibles estudiantes, pues este puede ser un yacimiento de negocio, que ya se está explotando en lugares como Cataluña.
De igual modo ha insistido en la necesidad de consolidar en el exterior a las empresas que se han lanzado al reto de salir fuera, porque “es más satisfactorio mantener a una empresa en el exterior que animar a otra”. También ha propuesto favorecer la asociación de empresas para que tengan “más músculo” a la hora de cruzar fronteras.
Preguntado sobre si la situación que vive Grecia puede afectar a las exportaciones regionales, se ha mostrado convencido de que la inestabilidad económica del país heleno no les va a afectar, pues el nivel de ventas a este país es pequeño y rondan los 33 millones de euros.
No obstante, ha precisado que Grecia es un gran competidor de España en aceite de oliva y “quizá por ahí se encuentran consecuencias negativas”.
En este sentido, y sobre el veto ruso a ciertos productos europeos que comercializan empresas castellano-manchegas, ha apuntado que lo que han dejado de percibir de esas ventas lo han compensado con lo ingresado en otros mercados.
