Denuncian “el lamentable estado del mantenimiento” del centro de discapacitados psíquicos ‘Cadig Albatros’ de Albacete

Según CCOO, un solo trabajador, y a tiempo parcial, se ocupa del mantenimiento de todas las instalaciones del ‘Cadig Albatros’, de Albacete, un centro de 6.800 metros cuadrados donde se atiende a 130 personas con discapacidades psíquicas; muchas de ellas internas.

“El estado de las instalaciones es deplorable y conlleva riesgos evidentes para los usuarios y para los trabajadores. Recordamos a la JCCM que tiene que garantizar la salud de todos ellos y quer cumplir la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”, denuncia Mari Carmen Juste, responsable de la FSC-CCOO en Albacete:

“Enchufes desprendidos, luces inexistentes, manivelas inadecuadas y rotas, asideros en los aseos de discapacitados a punto de caerse; lavabos caídos… Hemos solicitado a los servicios periféricos de Sanidad y Asuntos Sociales de la JCCM que sean responsables y solucionen ya semejante abandono. El vergonzoso estado de las instalaciones y la dejación en su mantenimiento por la ‘reducción de gasto’ pueden ocasionar graves consecuencias.”

“Tanto las personas discapacitadas que allí viven como el personal que las atiende corren riesgos permanentes de sufrir accidentes, que pueden prevenirse fácilmente con la contratación de personal de mantenimiento público cualificado. Este es un gasto obligado -si es que lo quieren llamar ‘gasto’-, tanto para el bienestar de las personas discapacitadas como para cumplir la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”, recalca Juste.

“Son ya más de 25 años los que han pasado desde que se abrieron las puertas del Cadig Albatros, el centro de referencia para todas las familias que por desgracia sufren la impotencia de no poder atender en sus hogares a sus familiares con grave discapacidad intelectual”

“El centro tiene 6.800 metros construidos y atiende a cerca de 130 personas entre usuarios y usuarias externos e internos”, explica Llanos Sotoca, secretaría de Salud Laboral de FSC-CCOO en Albacete, que ha preparado un informe (*) para los servicios periféricos de Sanidad y Asuntos Sociales de la JCCM.

“En sus inicios, el Cadig Albatros contaba con tres trabajadores en el servicio de mantenimiento. Con el tiempo, pasaron a ser dos y luego un solo trabajador; que además, disfruta desde hace unos meses de una jubilación parcial, por lo que es imposible llevar todas las tareas que este centro conlleva; más aún teniendo en cuenta que también se han recortado los gastos en material”

“Este trabajador se tiene que ocupar del mantenimiento de todas instalaciones; y también de las ayudas técnicas que los usuarios y usuarias requieren para su vida diaria: sillas de ruedas, andadores, bañeras técnicas…”

“Si a esta situación le añadimos las discapacidades psíquicas de los usuarios y el mal estado físico de muchos de ellos, es indudable que este centro requiere de un mantenimiento continúo que no tiene. Y ahora mismo, requiere una actuación a fondo en todas sus instalaciones y la reparación y reposición de todos los materiales e instrumental que lo requieren”

“La importancia de este servicio público y la utilidad del mismo es incuestionable. Recordamos a la Administración que tiene la obligación de prestarlo en condiciones de óptima calidad; y que hay una Ley de Prevención de Riesgos Laboral que debe cumplir. Por ello, la FSC-CCOO “no descarta acudir a las autoridades pertinentes si no se toman las medidas necesarias con la mayor urgencia”

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